La primera vez que se me ocurrió hacer los huevos para ramen (ajitsuke tamago) me lo pensé un poquito porque me parecía que me iba a resultar difícil, pero lo cierto es que es más sencilla de lo que parece y puedes guardar los huevos en la nevera en un tupper unos días e ir utilizándolos en diferentes platos. Vale la pena hacerlos porque el sabor es muy rico y al final es una forma distinta de cocinarlos, para que no nos aburramos.
Nutrición orgánica
A pesar de que existen muchas dudas sobre si es bueno o no comer huevo, lo cierto es que tiene gran cantidad de vitaminas y proteínas de alto valor biológico. El consumo del huevo está especialmente recomendado para mujeres embarazadas, ya que contiene colina, un tipo de vitamina B que resulta fundamental para el desarrollo de las estructuras, órganos y sistema nervioso del bebé.
Nutrición emocional
Cuando nos sentimos tristes es natural buscar una sensación de recompensa rápida, es una cuestión de bioquímica cerebral, y para ello habitualmente recurrimos a alimentos con azúcar. Una alternativa a estos alimentos son los que contienen triptófano (precursor de la serotonina), como el huevo (también el plátano, la lechuga, la piña…). Esta sustancia se considera de acción antidepresiva natural y sin los efectos colaterales del azúcar.
Acompaña esta receta con
Puedes comer estos huevos con este ramen vegetariano, o con esta versión diferente de ramen. También son ideales para comer junto a este ragú de setas vegano. Darán un toque especial a cualquier plato con el que lo combines, así que te recomiendo que los pruebes
Ajitsuke tamago (huevos para ramen)
4
raciones4
horas15
minutosEs importante tener preparado un bol de agua fría con hielo para parar la cocción y que los huevos queden en su punto. Esto hará que mantengan mucho mejor sus propiedades, además de tener una textura mucho más agradable y cremosa.
Ingredientes
4 huevos
4 o 5 cucharadas de tamari
½ taza de mirín
1 cucharadita de azúcar
2 ajos
1 trozo de jengibre
1 trozo de cúrcuma
Instrucciones
- Con una aguja finita hacemos un pinchazo en la base de cada huevo. Esto evita que se rompa al hervir.
- Hervimos los huevos en agua durante 5 minutos. Si son huevos grandes, pueden necesitar hasta 7 minutos.
- Una vez pasados esos 5 minutos, los sumergimos en agua helada con hielos para detener la cocción y les quitamos la cascara.
- En un cazo con tres vasos de agua ponemos el resto de ingredientes y los hervimos durante 10 minutos. Apagamos el fuego.
- Introducimos los huevos en el agua teñida durante 4 horas para que maceren y luego ya los tenemos listos para utilizar.
Notas
- Esta receta acompaña muy bien al Ragú de setas vegetariano.